Intervención de la fiscal General de Justicia de la Ciudad de México, Bertha Alcalde Luján, durante la inauguración de las instalaciones del Centro de Atención Integral para la Búsqueda de Personas
Bertha Alcalde Luján:
Muy buenos días tengan todas y todos ustedes. Muchísimas gracias por estar aquí.
Mando un saludo, primero que nada, a las familias. Muchísimas gracias a las representantes y a los representantes de colectivas, a familias independientes, tanto las que están en el presídium como las que se encuentran en el público. Este centro es para ustedes y les damos la más cordial bienvenida.
Después, a la jefa de Gobierno: muchísimas gracias, jefa de Gobierno, por estar presidiendo este evento tan importante de inauguración.
Un saludo también al presidente del Tribunal de Justicia, al secretario de Gobierno, al secretario de Seguridad Ciudadana, instancias con las que nos coordinamos todos los días en el ámbito de la búsqueda de personas desaparecidas e instituciones que van a estar representadas en este Centro Integral de Búsqueda. También saludo al comisionado de Búsqueda de Personas, Luis Gómez, gracias por presidir estos esfuerzos; al comisionado ejecutivo de Atención a Víctimas; a la titular de Implementación de la Fiscalía General de Justicia, órgano encargado también de implementar la estrategia de búsqueda en nuestra institución; al fiscal especializado; al titular del C5; a la titular también de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México —muy contentas, muy contentos de que esté hoy aquí y muchas felicidades por el reciente nombramiento—, y también a nuestra comisionada nacional, Martha Lidia Pérez Gumercindo. Muchísimas gracias por estar aquí presente, representar a la federación; para nosotros es muy importante seguir fortaleciendo los esfuerzos con la federación.
Además de darles la bienvenida, quisiéramos decir que este día para nosotros es muy importante. Hoy en día se pueden materializar muchos de los esfuerzos que tienen que ver con la estrategia de búsqueda de personas en la Ciudad de México.
Hace ya algunos meses pudimos exponer la Estrategia de Búsqueda de Personas en la ciudad, y buena parte de los compromisos estaban justamente centrados en la coordinación: lograr la coordinación entre las distintas instituciones que están involucradas en el proceso de búsqueda de personas desaparecidas, ya que uno de los reclamos más sentidos de todas y todos ustedes —un reclamo justo— tenía que ver, precisamente, con la fragmentación de esfuerzos en las instituciones y la necesidad de que pudiéramos coordinarnos mejor desde acá. Hace apenas una década, en el país apenas comenzaba a reconocerse la magnitud del fenómeno de la desaparición de personas. Eran años en que las familias se enfrentaban a la búsqueda prácticamente solas, cuando aún no existían protocolos especializados ni estructuras dedicadas a la búsqueda.
Desde entonces, el trabajo incansable de los colectivos, las organizaciones civiles y las instituciones comprometidas ha permitido construir un Sistema Nacional y Estatal de Búsqueda más sólido, con bases legales, capacidades técnicas y con cierta coordinación institucional.
Ha sido un largo camino y todavía queda muchísimo por hacer. Pero lo cierto es que hoy la desaparición de personas es una prioridad institucional fundamental.
Seguiremos invirtiendo recursos, desarrollando capacidades y fortaleciendo la atención a las familias, con la convicción de que cada avance, por pequeño que sea, representa esperanza para quienes buscan y compromiso para quienes tenemos la responsabilidad de servir.
La voluntad política de disponer recursos al servicio de la búsqueda de personas se traduce en una mejor coordinación entre diversas instituciones, alineación de un objetivo en común y generación de mecanismos que garanticen la participación en la búsqueda.
Necesitamos moldear las instituciones en función de las necesidades de las familias y no al revés. Debemos cambiar procesos y crear espacios que fomenten la atención integral, la participación, el intercambio de información entre instituciones y la planeación eficaz.
La búsqueda de personas se encuentra en el centro de las acciones de gobierno de la Ciudad de México, tal como ha quedado reflejado en la estrategia de fortalecimiento de ésta, presentada en abril de este año.
Como lo mencioné, uno de nuestros compromisos más importantes está centrado en la coordinación. Además de este centro, se estableció el Gabinete de Búsqueda, liderado de manera conjunta entre la Secretaría de Gobierno y la Fiscalía, pero que cuenta con la participación fundamental de la Secretaría de Seguridad, del Tribunal —representado por el INCIFO—, de la Comisión de Atención a Víctimas, entre otras instituciones fundamentales.
En el marco de este gabinete hemos contado también con el apoyo de la Secretaría de Salud, de la Secretaría de Bienestar, de la Subsecretaría del Sistema Penitenciario y de la Procuraduría de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, entre otros, para fortalecer el acompañamiento a las familias y la búsqueda y localización con un enfoque en los grupos de atención prioritaria.
A través de este gabinete hemos sumado esfuerzos desde distintos poderes y ámbitos para garantizar que el derecho a ser buscado sea protegido y respetado, y que las familias reciban la atención y acompañamiento adecuados.
Por parte de la Fiscalía, consideramos que nuestro rol en la búsqueda es clave, no solo desde la perspectiva de investigación y de identificar responsables, sino comprendiendo la necesidad primordial que tienen las familias de reencontrarse con su ser querido, lo cual debe ser atendido desde una perspectiva humanitaria. Por eso, además del Centro Integral de Búsqueda, contamos hoy en día, como parte de los esfuerzos para mejorar la coordinación, con un solo fotoboletín de búsqueda de personas.
Se acabaron los días en que las familias tenían que ir de institución en institución, donde no se sabía en dónde se tenía que levantar el reporte, donde teníamos algunos desaparecidos que eran de la Comisión y algunos de la Fiscalía. La idea es que podamos trabajar como uno mismo, con esfuerzos en conjunto.
También tenemos un único sistema de registro de desaparición en la ciudad —era un esfuerzo también al cual nos comprometimos— y, muy importante, un Protocolo de Búsqueda que establece el trabajo de grupos interinstitucionales, de tal forma que los casos de desaparición que tenemos reportados día con día se asignan a grupos no de la Fiscalía o de la Comisión o de la Secretaría, sino a grupos conformados por personal de todas las instituciones.
También, como parte de la coordinación, firmamos un convenio con el Instituto de Servicios Periciales y Ciencias Forenses y la Fiscalía de la Ciudad, en abril también de este año, con el presidente del Tribunal Superior de Justicia, y hemos establecido mecanismos mucho más claros para mejorar la coordinación, para identificar, sobre todo, personas fallecidas no reconocidas, lo que forma parte fundamental de los esfuerzos que estamos comprometidos a fortalecer.
Asimismo, desde la Fiscalía hemos creado una instancia única en su tipo a nivel nacional, que empieza ya a rendir frutos: la Unidad de Identificación Humana y Búsqueda de Familia, la cual tiene como objetivo centralizar la información necesaria para dar seguimiento a los casos que involucran personas fallecidas sin identificar y personas identificadas con familias pendientes de localizar.
Dicha información proviene, entre otras, de las fiscalías territoriales, de la Fiscalía de Homicidios y de Servicios Periciales, entre otras, y esto nos ha permitido localizar a más de 300 familias que probablemente no sabían que su familiar había fallecido.
Gracias a estos esfuerzos hemos logrado también la restitución, con entrega digna, de 196 personas fallecidas. Estos avances se han dado también en el marco de la elaboración y preparación del Plan de Recuperación Controlada en el Panteón Civil de Dolores, cuya ejecución comenzará la próxima semana con la intervención arqueológica de la primera fosa, cuyo proceso contará con la participación de expertos y la observación de familias buscadoras.
Con estas acciones mantenemos nuestro compromiso de liderar procesos de identificación de personas fallecidas, que también son fundamentales para avanzar en la búsqueda de personas.
Estos son tan solo algunos de los avances en el cumplimiento de los 30 compromisos que forman parte de la estrategia de fortalecimiento de la búsqueda de personas.
Pero hablando específicamente del centro, la creación del Centro de Atención para la Búsqueda de Personas se da como respuesta, como les decía, a exigencias de familias por una coordinación real entre la Fiscalía, la Comisión de Búsqueda y la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
El principal objetivo de este centro es encontrar respuesta institucional en un mismo espacio, para hacer más eficientes nuestras acciones en materia de búsqueda, facilitar el acceso institucional para las familias que desean reportar la no localización de un ser querido y mejorar la coordinación entre las diversas instituciones, actuando como un solo equipo especializado de búsqueda inmediata, y así continuar en la consolidación de lo señalado por el Protocolo de Búsqueda Inmediata de la Ciudad de México, aprobado en junio de este año.
Asimismo, este centro de atención refuerza también la coordinación entre la investigación y la búsqueda para casos de desaparición conocidos como de larga data, pues integra el enfoque de localización con las investigaciones en curso por parte de las fiscalías, lo cual permite concretar polígonos de búsqueda y contribuir a los planes de búsqueda.
Sumar la visión desde la Fiscalía como ente investigador y la visión humanitaria de la Comisión de Búsqueda de Personas nos ayuda a evitar duplicidad de esfuerzos y consolidar mejores prácticas para la búsqueda. El inmueble, destinado actualmente al Centro de Atención Integral para la Búsqueda de Personas, cuenta con una historia de servicio a favor de la ciudadanía.
Fue inaugurado en 1970 por el entonces presidente Adolfo López Mateos. Durante más de tres décadas albergó las instalaciones del SEMEFO, dependiente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México. Este espacio fue considerado el primer servicio forense del país, además de un referente en la formación de profesionales de medicina, derecho y criminalística.
En 2018, el Comité del Patrimonio Inmobiliario del Gobierno de la Ciudad de México aprobó su asignación a la entonces Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, con el propósito de fortalecer la atención y peritajes a las víctimas, y destinarlo a nuevos fines institucionales como el Centro de Atención Integral de Búsqueda de Personas.
Para lograr su reconversión fue necesario transformar el edificio. Dentro de las labores destacan el reforzamiento estructural y la rehabilitación general del edificio, desde la planta baja hasta el segundo nivel.
De igual forma, se habilitó por completo el sótano, el cual no brindaba antes ningún tipo de servicio y que ahora da lugar a los espacios para los equipos especializados de búsqueda.
Las acciones contemplaron la renovación integral de las instalaciones eléctricas, hidrosanitarias y de datos, así como adecuaciones para la dignificación de los espacios administrativos y de atención al público, complementadas con la dotación e instalación de mobiliario en las áreas operativas de servicio.
Con estas intervenciones, el inmueble fue mejorado en su funcionalidad, seguridad y condiciones operativas. La inversión total asciende a 43 millones de pesos. El proyecto del CAIB fue pensado considerando a las familias usuarias de estos servicios, que se acercan a las instituciones para presentar reportes de personas desaparecidas o solicitar apoyo institucional en la búsqueda de sus seres queridos.
En el CAIB tendremos personal de las siguientes áreas: la Comisión de Búsqueda de Personas, que da seguimiento a las acciones de búsqueda con cerca de 100 integrantes; el Grupo Especializado de Apoyo a la Búsqueda Inmediata, dependiente de la Dirección Ejecutiva de la Unidad de Contacto de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México; y, por parte de la Fiscalía, la Dirección Biopsicosocial para la Atención Pericial a Víctimas, dependiente de la Coordinación General de Servicios Periciales, con aproximadamente 50 integrantes.
La Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición de Personas y Desaparición Cometida por Particulares, encargada de investigar dichos delitos y de coadyuvar en la búsqueda de personas, cuenta con aproximadamente 80 integrantes; y la Unidad de Implementación, coordinación a la que se ha encomendado dar seguimiento interinstitucional a la estrategia de fortalecimiento de búsqueda de personas previamente mencionada.
Mediante este esfuerzo, las acciones de búsqueda y de investigación se verán fortalecidas, y mejorará considerablemente la atención a las familias que acuden a nuestras instituciones esperando contar con apoyo institucional para localizar a sus seres queridos.
Aprovecho para reiterar el compromiso de la Fiscalía de acompañar a las familias en este recorrido y de poner en marcha todas las acciones que sean necesarias para fortalecer los esfuerzos de localización de las personas cuyo paradero se desconoce.
Somos una Fiscalía que busca, que reconoce su rol y su obligación en esta problemática, y que pretende permanecer cerca de las familias buscadoras.
Este espacio es una muestra de voluntad de trabajar en equipo, de mejorar las condiciones de atención y, sobre todo, de continuar mejorando para responder a sus necesidades.
Como he mencionado antes, no podemos permitir que el papeleo, la falta de coordinación o la indiferencia sean un obstáculo para la justicia. Sabemos que nos queda un camino por andar, pero estamos aquí con paso firme y con el compromiso impostergable de combatir estos obstáculos para poder dar las respuestas anheladas por las familias, por ustedes.
Estar hoy aquí, en la inauguración de este Centro de Atención Integral, es una muestra de ello. Quiero reconocer la lucha de cada una de las familias aquí presentes y, una vez más, agradecer su presencia.
Este espacio es para ustedes y por ustedes. Permítannos construir de la mano con ustedes. Es el mejor camino para encontrar a las personas desaparecidas y para tener instituciones cada vez más fuertes.
Seguimos adelante con el camino trazado de manera conjunta en la estrategia para fortalecer la búsqueda de personas y reconocemos la importancia que tiene esto para ustedes y para la sociedad. Gracias a todas y a todos por estar aquí el día de hoy.














